miércoles, 21 de marzo de 2012

¿Es importante la relación familia-escuela?

  El año pasado, más concretamente en el segundo cuatrimestre en la asignatura de Educación y familia, tratamos detenidamente la importancia de la familia en la educación de los hijos. Este agente, como a continuación mostraremos, debe mantener una estrecha relación con las instituciones educativas, siempre facilitando el aprendizaje integral (en todas las dimensiones) de los hijos y alumnos. Seguidamente, recalcamos tanto los beneficios potenciales como los riesgos potenciales existentes en la relación familia-escuela.

RELACIÓN FAMILIA-ESCUELA: BENEFICIOS POTENCIALES
  Dentro de la relación familia- escuela, los beneficios que pueden haber son, tan importantes o más, que el propio proceso de enseñanza- aprendizaje; el diálogo entre los diferentes agentes educativos, facilita la participación y la implicación de las familias en las instituciones educativas. Por otro lado, el trabajo conjunto amplía las medidas de los escolares, es decir, se trabaja la formación global de la persona.
  Para el crecimiento madurativo de los menores es necesario marcarse unas metas comunes a nivel familiar y escolar. El desarrollo personal de los alumnos se realiza tanto en el aula como en casa. En resumen los beneficios que se obtienen a raíz de esta relación son mayores que los riesgos.

RELACIÓN FAMILIA-ESCUELA: RIESGOS POTENCIALES 
  El trabajo conjunto entre la familia y la escuela puede implicar una serie de riesgos que tengan una incidencia negativa en la formación de los alumnos. En primer lugar, una confusión de roles (papeles) entre los docentes y los padres, puede provocar interferencias entre las funciones de cada uno. Ejemplo (cuando los padres se declaran por sí mismos que ellos son los únicos capaces de decidir sobre la educación de sus hijos). Las falsas expectativas que se pueden tener, tanto por parte de la familia como de la escuela, hacen que los objetivos y las finalidades de la educación no acompañen a la realidad del menor, además la sociedad suele poner en la educación unas expectativas demasiado grandes, deseando que la escuela solucione problemas sociales, que impliquen a toda la comunidad.
  Por último la falta de visión general, hace que en ocasiones la educación se vea como una meta a corto término, dejando de lado que el proceso educativo es a lo largo de la vida.